En torno a los diversos temas que serán significativos en el rediseño de las experiencias de enseñanza y aprendizaje en los próximos años.
- Las habilidades interpersonales, sociales o blandas no son exclusivas del siglo XXI. Sin embargo, estas habilidades son ahora fundamentales para un sector más amplio de la población (es decir, no exclusivamente para las élites como antes), así como para un segmento creciente de la fuerza de trabajo.
- Las innovaciones en el sector de la educación han sido ampliamente adoptadas en las últimas décadas, especialmente cuando la retórica de la innovación ha sido apoyada por el uso de las TIC en el aula. Sin embargo, aquellos individuos que ya están estudiando dentro del sistema educativo formal no pueden esperar a que se implementen iniciativas en la reforma educativa. La implementación puede tomar años: demasiado tiempo para aquellos que actualmente están en el sistema. En lugar de “educacionalizar” todos los problemas de la sociedad, es probable que sea una mejor idea desarrollar estrategias personales para aprender, desaprender y reaprender en diferentes contextos, situaciones e interacciones.
- La movilidad puede ser (re) considerada como un elemento que puede proporcionar una relevancia especial tanto para los estudiantes como para los educadores. La posibilidad de aprender de otros entornos y comunidades, así como de situaciones cambiantes, estimula nuevas combinaciones de conocimientos, disciplinas, así como adaptación y colaboración, entre otras habilidades blandas relevantes. Además, la creación de nuevos mecanismos para proliferar experiencias de aprendizaje basadas en el trabajo, así como la adopción de retroalimentación efectiva por parte del mercado de trabajo, deben considerarse cruciales para ajustar la educación formal a fin de satisfacer las necesidades de una sociedad basada en el trabajo.
Si el conocimiento es intrínsecamente dinámico, es importante destacar la idea del aprendizaje como un viaje de por vida, un viaje que no está limitado por ningún espacio, institución o diploma. Teniendo en cuenta la idea de un viaje continuo, el concepto de conocimiento de Moravec (2008) parece ser más que apropiado para describir este aprendizaje ampliado. El explica:
[Un] trabajador nómada del conocimiento y la innovación, es decir, una persona creativa, imaginativa e innovadora que puede trabajar con casi cualquier persona, en cualquier momento y en cualquier lugar. Además, los knowmads son valorados por su conocimiento personal y este conocimiento les da una ventaja competitiva. La sociedad industrial está dando paso al trabajo basado en el uso de conocimiento e innovación. Mientras que la industrialización de la sociedad 1.0 requirió que la gente se estableciera en un lugar para desempeñar un papel o una función muy específica, los trabajos asociados con los trabajadores del conocimiento y la información se han vuelto mucho menos específicos en cuanto a tarea y lugar. Además, las tecnologías permiten que este nuevo paradigma de trabajadores se ocupen en un lugar específico, de forma virtualmente, o cualquier otra combinación. Los knowmads pueden reconfigurar y recontextualizar instantáneamente sus entornos de trabajo, y lograr una mayor movilidad para crear nuevas oportunidades.
Es innegable que en muchas regiones del mundo todavía se valora únicamente aquellas experiencias y conocimientos que son respaldados por un trozo de papel o un diploma. Pero también es cierto que el mundo del trabajo exige cada vez más un mejor provecho del talento a través de mecanismos más flexibles. Estos elementos son sólo síntomas de una transformación mucho más grande que ocurrirá (a diferentes velocidades) en el mundo de la educación. Y, aquellos que se ajusten al perfil knowmad probablemente estarán en una posición considerablemente mejor para tomar ventaja de estas transformaciones.
Ese es el papel y el desafío del Asistente de Negocios.